La articulación de la rodilla es la articulación más grande del cuerpo humano. Cada día se somete a un gran esfuerzo. Con el tiempo, esto puede provocar cambios degenerativos. Es más, las rodillas son muy vulnerables a las lesiones. Por ello no es de extrañar que la gente se queje de dolor en las rodillas.
Anatomía de la articulación de la rodilla
La rodilla o la articulación de la rodilla es la articulación más grande del cuerpo humano. La rodilla es una articulación de bisagra esencial que permite la flexión y la extensión de las piernas así como la rotación interna y externa al flexionarse.
Dolor de rodilla derivado de cambios degenerativos
Las rodillas están expuestas a grandes esfuerzos todos los días. Con el tiempo, esto puede provocar cambios degenerativos que están asociados al deterioro de la capa de cartílago. La función amortiguadora del cartílago sufre y se puede sentir rigidez y dolor en la rodilla.
Esto explica por qué cada vez más gente sufre artrosis en la rodilla (degeneración de la articulación) a medida que la edad avanza. La artrosis de la rodilla (gonartrosis) es un proceso progresivo. En las fases tempranas, el dolor de rodilla solo se produce ocasionalmente (p.ej. al llevar peso, tras periodos prolongados de descanso), mientras que en un estado avanzado, el daño del cartílago es tan extenso que los huesos prácticamente rozan uno con otro. El dolor se produce con mayor frecuencia y es más intenso.
Síntomas del dolor de rodilla
El dolor puede iniciarse de forma aguda o como proceso crónico:
El dolor agudo de rodilla comienza de repente, por ejemplo después de una lesión.
El dolor de rodilla crónico se manifiesta gradualmente, al principio es un dolor leve que se intensifica con el tiempo, como en la artrosis de rodilla, por ejemplo.
Calidad del dolor de rodilla: ¿cómo se siente el dolor?
Dolor de tipo opresivo, punzante, calambre o dolor sordo continuo
Signos externos: derrame, rojez, hinchazón, calor al tacto, libertad de movimiento restringida
Tratamiento del dolor de rodilla
El tratamiento del dolor de rodilla depende de la causa. Con frecuencia se aplican las opciones terapéuticas conservadoras siguientes:
Analgésicos antiinflamatorios y pomadas
Tratamiento con calor o frío
Productos sanitarios ortopédicos (plantillas, vendajes, ortesis, zapatos ortopédicos)
Fisioterapia
Entrenamiento muscular (fortalecimiento y estiramiento)
Electroterapia y tratamiento de ultrasonido
Sin embargo, también hay situaciones en las que ya no se puede evitar una operación. Pero hoy día muchas operaciones se pueden realizar casi atraumáticamente mediante artroscopia.
Fuente: www.mediespana.com